1.    Otro año más donde Varela utiliza la palabra Paz. Cita su misma frase del 2017 “… la fuerza del Estado solo se utiliza para enfrentar los problemas que afectan al pueblo…”. ¿Cual paz?  En el 2017 varios fueron las acciones de represión contra el pueblo, no contra los problemas del pueblo. Se reprime a las comunidades indígenas  que luchan por su derecho a la tierra y sus recursos naturales, contra los proyectos hidroeléctricos y mineros que atentan contra el ambiente; a los pobladores de barrios que claman por el derecho al acceso al agua potable; represión a los educadores de áreas de difícil acceso que clamaban por seguridad y condiciones de trabajo ante la muerte de dos educadores; represión a los estudiantes de la Universidad de Panamá, violentando la autonomía universitaria; represión a obreros que exigen el respeto a sus derechos laborales y sindicales; y criminal represión contra los pobladores de humildes comunidades de Vista al Mar de Panamá Oeste y en Río Tapia de Panamá Este, comunidades de Pedregal y Mañanitas, que exigían al gobierno cumplir los acuerdos alcanzados ante los desalojos forzosos que dejó como saldo la muerte de 2 madres y 2 niñas. Esta es la “nueva era de la democracia” según Varela.

Igualmente señaló que “… En estos 42 meses no se ha repetido la represión ocurrida en Changuinola, San Félix y Colón…”; olvida que él cogobernó en la masacre de Changuinola.

2.    Dijo que no va a permitir que “los fantasmas de la narco-política o la corrupción regresen” ¿Acaso se han ido? ¿Por qué no presenta nombres y pruebas de los narco-políticos?  Acaso no sabe que la mayoría de los corruptos tienen país por cárcel, gozan de impunidad, y que bajo la justicia selectiva que impera, hay quienes no han sido llamados. Corruptos y corruptores del PAN, caso Lavítola, Finmeccanica, Panama Papers, Odebrecht, Manzana Azul, partidas discrecionales, contrataciones públicas, están tranquilos pues estos casos pueden ser enterrados por esa “justicia corrupta” que beneficia a toda la cúpula económica y política.

Los procesos de corrupción en el país son crecientes y recurrentes, a pesar los discursos falaces de “combatir la corrupción”.

3.    Nuevamente una lista larga y repetitiva de obras “licitadas, iniciadas o por iniciar” carentes de un análisis de cómo se licitaron, a quién responden, los costos de las mismas y los atrasos en muchas de ellas. Deja de lado que algunos proyectos de vivienda están enmarcados en el proyecto Colón Puerto Libre que demanda espacios territoriales para su realización (Centro de Colón), y que éste y otros están siendo utilizado para promover al supuesto ungido a la presidencia por el panameñismo. Igualmente, apuesta a inaugurar obras, tal como lo han hecho sus antecesores en el marco de los comicios electorales.
 
Dice que las obras han sido financiadas sin aumentar los impuestos, pero cuantos intentos por aumentarlos ha hecho esta administración (combustible, reavaluó, etc.), detenidos por la lucha del pueblo, algunos dejados para implementar después del 2018. ¿Con qué las financió? Con deuda pública.

Sin olvidar que ha sido la misma tónica de los discursos presentada por sus antecesores, cuya gestión aparecen involucradas en los casos de corrupción de Odebrecht. Olvido que algunas licitaciones han sido cuestionadas por favorecer a círculos cercanos.

4.    Planteó entre sus logros el CEPADEM, cuyo financiamiento esta en incertidumbre pues depende de los fondos que se “recuperen” de la corrupción, lo que esta en duda dado los sobreseimientos a corruptos y corruptores; sin dejar de mencionar que el primer compromiso de pago es para el 2019.

5.    Resalto el crecimiento económico, el cual según Varela se debe a los megaproyectos, dejando de lado que muchos de ellos han sido focos de corrupción, han favorecido al gran capital local y extranjero, están al servicio de “Panamá Hub de las Américas”. Dice Varela que “En esta administración el crecimiento económico va de acuerdo al poder adquisitivo del panameño no en base a la especulación”, la especulación en los precios es constante, pero además el poder adquisitivo de la mayoría de los panameños ha sido mermado por el alto costo de la vida. Precisamente en los 10 años al que hace referencia el poder adquisitivo de los asalariados ha disminuido en 30%.

Su única mención al sector agropecuario gira en torno a la inauguración de la Carretera Interamericana Agua Fría-Yaviza en Darién, que según Varela “consolidará a Darién como la reserva agropecuaria del país”. Para nada abordó los problemas que confronta el sector, ni la política de desmantelamiento que se viene ejecutando desde la década del setenta.

6.    Asocio crecimiento económico y medios de comunicación social, dejando entrever que su gestión de gobierno ha favorecido a los empresarios, por ende, recomendaba divulgar los “resultados positivos del gobierno” como base de mantener el crecimiento. Como en otras ocasiones, ello puede entenderse que habrá más publicidad gubernamental para los medios de comunicación social.  En ningún momento increpó al llamado “cuarto poder”, a los “patrones” o tal vez debemos decir al “patrón”.

7.    Misma retorica en tema de salud y educación. A pesar de procesos privatizadores, la mora quirúrgica pasada se mantiene en 20% y desconocen la actual; obvió hacer referencia sobre el estado deplorable de las instalaciones de salud y la falta de medicamentos. En educación, el mismo discurso de Martineli, inauguración de “escuela de primer mundo” con currículo totalmente bilingüe, sin abordar los temas de infraestructura escolar y escuelas ranchos, falta de material didáctico, deserción escolar, entre otros.

8.    Un país seguro. “Lideramos estadísticas de país más seguro de la región”, seguramente en la “región de las maravillas en el que habita Alicia”. Ello a pesar que aumento la producción y tráfico de drogas, y las estadísticas evidencian casi el mismo nivel de delitos. Al igual que sus antecesores apuesta a la política fracasada de “mano dura”.

9.    Visión restringida de movilidad urbana, la cual sitúa en más carreteras, inversión de carriles, nuevos buses y trenes, ampliación del metro, unificación de tarifas. Dejó de lado que el concepto de movilidad urbana como visión humanista se relaciona directamente con la mejora de la calidad de vida del ciudadano, ya que pasa necesariamente por una restructuración de la forma actual de hacer ciudad; implica planificación integral y gestión eficaz y sostenible del espacio público y del transporte.

10.    Según Varela los logros del 2017 son muestra de “… distribución equitativa de la riqueza del país y justicia social para quienes habían sido olvidados por décadas”, lo que además de falaz es un gran irrespete al pueblo que carece de una vida decorosa. Desconoce que uno de cada cuatro panameños vive en pobreza, que el 17% de los asalariados son pobres, que aunque la economía crece la proporción de la riqueza que se destina a salario disminuye, que ningún salario mínimo alcanza para cubrir el costo de la canasta básica ampliada, que Panamá es uno de los 10 países a nivel mundial con peor distribución de la riqueza.

11.    Honestidad y Transparencia palabras recurrentes. Olvida Varela que las asignaciones de los principales megaproyectos en su gestión de gobierno fueron otorgadas con las mismas normativas, ampliamente cuestionadas, que dejó Martinelli. Muchas de las contrataciones públicas han sido denunciadas por diversos sectores sociales como procesos amañados (negociados). Se mantienen las instituciones foco de corrupción de gobiernos anteriores solo con cambios de nombres. Los gastos suntuarios continúan. Autoridades de gobierno, copartidarios, familiares y amigos del gobierno mencionados en caso de corrupción parecen gozar de impunidad. Aunado a ello, las instituciones que deben fiscalizar, garantizar transparencia se mantienen dormitando.

12.    Nombramiento de Magistrados y Justicia. Reiteró justificación en nombramientos de nuevos magistrados de la CSJ, tema que, si bien destino pocas palabras, indicó que “garantiza altos estándares de profesionalismo, independencia, capacidad técnica y ética”. Olvido, que tal como lo ha hecho todos sus antecesores del, PRD, CD y Panameñista, pareciera más un interés por blindarse ante futuras denuncias de casos de corrupción en su administración. Toda la ciudadanía conoce que tanto Zuleyka Moore como Ana Tovar de Zarak, están vinculadas de una u otra forma a las estructuras del poder económico y político, y son afines al gobierno.

Dice Varela “Este será un año decisivo para alcanzar la administración de justicia que requiere Panamá, para cerrar este capítulo oscuro de nuestra historia, que los responsables acepten sus faltas, devuelvan el patrimonio del pueblo que se llevaron y avanzar reconciliados, unidos como un solo pueblo hacia el torneo electoral”. Como se ve, nunca planteó juzgados y condenados, dejando entrever un pacto de la partidocracia para posibles alianzas electorales.

Una vez más justifica los contratos del Estado con empresas envueltas en la corrupción so pretexto de recuperar fondos y no afectar obras ni empleo, aun cuando trabajadores han sido despedidos. Expresó: “La batalla que se está librando contra la corrupción en Panamá será un caso de estudio…”, y valla que sí, sorprende al mundo como corruptos y corruptores mantienen contratos con el gobierno, como se dan sobreseimientos, como corruptos devuelven una parte de lo robado y se quedan con el resto, como la mayoría de los involucrados obtiene país por cárcel, como los vinculados al gobierno no son investigados.

Culmina con la frase “… al final el Estado siempre gana”. La pregunta ¿en manos de quién esta el Estado? Desde el inicio de la república hasta la fecha ha estado en manos de las élites del poder económico, que ponen gobiernos, que han levantado fortunas usufructuando del Estado, que han estado involucradas en los escándalos de corrupción. Un Estado que hasta hoy impone la exclusión e inequidad social, carente de justicia para los pobres.

13.    La Selección y JMJ utilizadas politiqueramente. Para los panameños es un orgullo el pase de la selección de futbol a la Copa Mundial 2018, igualmente para los católicos la realización de la JMJ en el 2019, pero resulta irrespetuoso el uso de estos eventos de manera politiquera por parte del gobierno.

14.    En la última parte de su discurso, Varela sostiene “La vocación de Panamá sellada por nuestra posición geográfica ha sido la de unir al mundo con el camino de cruces, el ferrocarril, el Canal, los puertos y aeropuertos. El país que une al mundo no puede tener a su pueblo dividido”. Precisamente esa posición geográfica, que ha estado al servicio del comercio de los centros hegemónicos del sistema, la que ha promovido las diferencias regionales en el país, la que favorece a los sectores improductivos de la economía en detrimento de los productivos, la que acentúa los dos Panamá el de la opulencia y la pobreza.