Marchas en Chiriquí y Panamá se desarrollaron frente al anunciado acuerdo entre los gobiernos de Panamá y Honduras de importar hasta 25 mil trabajadores hondureños para laborar en el sector construcción. Las marchas estuvieron precedidas de piqueteos y otras acciones de protesta.
No es la lucha contra los obreros hondureños, nuestros hermanos de clase. Es la lucha contra un modelo esclavizante, contra gobiernos incapaces de brindar trabajo digno a su pueblo, y que buscan el enfrentamiento entre trabajadores utilizando políticas de movilidad laboral que el neoliberalismo impone para con ello flexibilizar aún más las leyes laborales, establecer condiciones de trabajo esclava, desplazar mano de obra nacional, reducir salarios, desconocer convenios colectivos y atentar contra la libertad sindical.
Habiendo suficiente mano de obra panameña para los proyectos que se desarrollan, un acuerdo entre los gobiernos de Panamá y Honduras de traer hasta 25 mil trabajadores hondureños, sólo busca sustituir trabajadores panameños en la Construcción para darle la oportunidad a las empresas de reducir salarios, aumentar el ejército de desempleados y vulnerar caras conquistas laborales.
El SUNTRACS se mantendrá alerta, dispuesto a recurrir hasta la huelga, de persistir el Gobierno en su nefasta intensión.
Frenadeso Noticias 17 de Julio 2012